Si tu hijo tiene dificultades para aprender a leer y en la escuela empieza a notarse el problema, sobre todo confía en él, hazle saber cuánto le quieres, cuan seguro estás de lo inteligente que es y de cómo acabará sabiendo leer tan y tan bien. Procura que no se agobie, que no se sienta estresado, explícale que cada niño tiene su ritmo y que estás a su lado para ayudarle, no para presionarle ni reñirle.
Intenta no estar preocupado sino ocupado en la solución, que es muy distinto, porque tu ansiedad también la nota tu hijo. Confía en que todo saldrá bien, simplemente dedica cada día tiempo a la lectura con tu hijo, todos los días con paciencia, amor y respeto por su ritmo.
Puedes empezar por aplicar las estrategias de lectura explicadas en este artículo:
Estrategias de lectura | Estimulación Temprana
No hay tiempo que perder, lo que no significa ir con prisas…
Adelante con la estimulación temprana,
por tu felicidad y la de tu hijo,